15 de noviembre de 2015

LA CUENTA 555

El cajón de sastre o "desastre" del contable

Si alguien nos pide una descripción de que es un cajón de sastre y somos contables, seguramente nos vamos a acordar de la cuenta 555 de partidas pendientes de aplicación (nuestro cajón "desastre")

La RAE indica que un cajón de sastre es un conjunto de cosas diversas y desordenadas.

¡Menudo desastre de contabilidad!, la cuenta 555 se encuentra llena de partidas pendientes de aplicación, ¿qué hacer? Nos toca contabilizar correctamente lo que hemos tenido que ir dejando aparcado hasta saber qué aplicación darle, a qué corresponde ese pago del que no tenemos justificante, ese cobro que nadie recuerda a qué corresponde, etc.

Ahora llega el fín del ejercicio y, sí o sí, toca hacer limpieza y dejar ese cajón "desastre" límpio como los chorros del oro y totalmente vacío. ¡MANOS A LA OBRA PUES!

La 555 y el Plan General de Contabilidad

El Plan General de Contabilidad define las partidas pendientes de aplicación como remesas de fondos recibidas cuya causa no resulte, en principio, identificable y siempre que no correspondan a operaciones que por su naturaleza deban incluirse en otros subgrupos.

El PGC especifica que sólo deben de permanecer registrados los apuntes en esta cuenta el tiempo estrictamente necesario, por lo que la revisión periódica de esta cuenta y la aplicación de las partidas que aparezcan en la cuenta 555 debe de ser una tarea periódica de los profesionales de la contabilidad, a no ser de que se apliquen todas las partidas en su momento y esta cuenta no refleje movimientos.