Los que nos dedicamos a esto de "los papeles", nos encontramos de nuevo con las prisas de última hora para llegar a tiempo a presentar los impuestos del trimestre, más si éstos se van a domiciliar.
Pero eso no es todo, en algún caso, la situación se agrava con la demora en la recepción de la documentación (esa factura que falta por hacer y no se ha hecho, esa otra del proveedor que no llega, etc).
Nuevamente tenemos que insistir en la necesidad de planificar el trabajo.
¿Cuántas veces, llevados por la vorágine del trabajo diario, llegamos a último hora, cuando no fuera de plazo, a nuestras obligaciones? Los impuestos, esa reunión, etc., etc.
Igualmente, ¿cuántos trabajos se quedan a medias o, lo que es peor, hechos, a falta sólo de análisis y toma de decisiones? ¿Cuántos repetimos por ello, con el consiguiente coste añadido? ¿Cuánto dinero nos cuesta la falta de toma de decisiones en la empresa?
"Perder" unos minutos al día o la semana puede suponer "ganar" muchos al final, además de reportarnos importantes beneficios.
Planifiquemos un momento en que "perder esos minutos y parar", revisar los distintos asuntos pendientes, analizar y tomar decisiones ¡nos pueden sorprender los resultados!